El historiador político y económico Nicholas Mulder investiga los inicios de las sanciones económicas como herramienta de esfuerzos internacionales de paz en el siglo XX.

En 1919, el presidente de EE. UU. Woodrow Wilson afirmó que las sanciones económicas eran una herramienta más poderosa que la guerra para persuadir a las naciones de mantener la paz.

Wilson argumentó que el aislamiento causado por las sanciones y la ausencia de pérdida de vidas las hacían un arma poderosa en el mundo moderno.

Hasta el día de hoy, las sanciones económicas siguen sobre la mesa, pero lo que realmente logran a menudo se olvida en favor de sus objetivos pacíficos.

Nicholas Mulder es un profesor asistente de historia europea e internacional en la Universidad de Cornell.

El arma económica se basa en la investigación de Mulder sobre las sanciones económicas y examina sus orígenes, influencia y el complicado papel que juegan en la historia internacional.